Pamela Anderson se ha puesto de actualidad. Otra vez. En esta ocasión, la actriz mundialmente reconocida por su papel en la ya veterana serie "Los Vigilantes de la Playa" ha posado en Nimes, Francia, en una plaza de toros para posicionarse en contra de la fiesta. Ha sido delante de la estatua de Christian Montcouquiol, un conocido torero fallecido en 1991, donde con un vestido rojo y un cartel donde se podía leer "Juegos Bárbaros" la interprete se ha posicionado en contra de las corridas de toros.

"En 2017, no hay ninguna razón para herir a los animales para el entretenimiento. Es cruel e inquietante", señaló poco después. Esta nueva reclamación encaja con la nueva imagen de la canadiense, que dejado de su lado su faceta de mito erótico de los noventa para centrarse más en la defensa de causas sociales, como el respeto a los animales.