Aida Folch, una de las actrices jóvenes con más proyección del cine español, se declara una "chica Trueba" y enamorada del cine con fondo social pero, en una entrevista con Efe, revela que está abierta a todo tipo de películas e incluso ha intentado ponerse en la piel de una "chica Bond". De la mano de Trueba debutó en el cine a los 14 años de edad en El Embrujo de Shanghai, después rodó El Artista y la Modelo, que le valió una nominación al Goya a mejor actriz y, según desveló, el año que viene tiene previsto filmar un nuevo largometraje junto a él.

Folch, que acudió a la ciudad egipcia de Alejandría para recoger un premio a su trayectoria profesional en la 33 edición del Festival de Cine de los Países Mediterráneos, aseguró que se siente "más a gusto" con el cine independiente, social y de autor, como actriz y como espectadora, y prefiere el cine europeo. Por ello, dijo que le gustaría seguir por esa trayectoria que está transitando, aunque afirmó que está "abierta" a otros géneros y trabajar en otros países con intención de "enriquecer" su carrera.

La actriz reveló que le llegaron ofertas para participar en audiciones para una película de James Bond y otras de los hermanos Coen y de Steve McQueen, pero no fue seleccionada. En inglés ya rodó una cinta estadounidense independiente que se llama Nameless, un thriller psicológico todavía por estrenar.