La cantante coruñesa Luz Casal rompe un silencio musical de cinco años con el estreno de nuevo disco: Que corra el aire. Realmente no ha estado callada en este lustro, porque su agenda de conciertos dentro y, sobre todo, fuera de España la mantiene activa, pero sí es cierto que el hecho de alumbrar nuevas canciones la vuelve a poner bajo el foco de la opinión pública. Según explica la propia artista de Boimorto, Luz Casal compone sin prisas, crea sin atarse a la tiranía de los plazos y lanza los discos cuando siente que tiene dentro tanto que decir que necesita compartirlo. "Soy bastante privilegiada en este sentido", admite.

Que corra el aire es el fruto, asegura Luz Casal, "de un proceso creativo consistente en ir dejándome llevar por las cosas que me interesan, de escuchar relajadamente el material que me va llegando, de darle vueltas a las ideas que, por fortuna, me siguen surgiendo". Y cuando la digestión concluye, brota un álbum: "La única alegoría que cabe buscar en el título, Que corra el aire, es que se me hacía necesario ventilar, regenerar mis espacios al modo que el viento arrastra la hojarasca". O sea, vaciarse para placer de sus incondicionales, darse el gusto de volver a la carretera con una gira que se presume larga y vuelta a empezar.

Gira con parada en A Coruña

Los preparativos de la gira, según la cantante, la tienen bien ocupada: hay ensayos, pruebas de vestuario, revisión de las escenografías, algunas que otras sorpresas que pulir... "Empezamos en el Palacio Valdés, en Avilés, que es un teatro pequeñito, pero tocaremos en otros espacios más grandes y el espectáculo ha de ser versátil para adaptarse a esos entornos cambiantes", comenta la artista, que el 24 de marzo estará en A Coruña, en el Palacio de la Ópera.

Distintos estilos

Que corra el aire reúne once canciones de distintos estilos, como si Luz Casal quisiera haber hecho una especie de guiño a toda la música que la acompañó a lo largo de su vida. Desde el cañero Tanto ruido, a Quise olvidarte, un bolero. Hay una canción en gallego, Meu pai, con evidente dedicatoria. Volver a comenzar es un todo un himno a la filosofía del tira p'alante, algo que Luz ha dado sobradas muestras de practicar. Lucas es un tema dedicado a un niño amigo que falleció de encefalitis. Y como colofón, cierra el disco una versión de Amores, que es un homenaje a Mari Trini, de la que Luz piensa que no ha recibido el reconocimiento que se merece.

"No sé si es sentido de la responsabilidad o qué, pero me encuentro tensa por las preocupaciones acumuladas entre el estreno del disco y el inicio de la gira. Es como un estado de alerta, con ganas de que todo salga bien... En el fondo es algo natural, esto me da vida", describe la cantante de Boimorto, sabedora de que la maquinaria ya se ha puesto en marcha, de que el aire ha empezado a correr.