Es conocida por todo el mundo como la ciudad de la luz. Y, durante esta última semana, París se ha iluminado todavía más gracias a los desfiles de la Fashion Week. Valentino, Carmen March, Loewe, Chloé, Alexander McQueen, Isabel Marant? confirmaron que la asociación verano con colores claros e invierno con colores oscuros ha perdido todo su sentido. Por eso, sus propuestas se llenan de prendas y de estilismos completos en blanco. El total white se cuela en el podium de tendencias que dominarán los escaparates, los armarios y las calles de medio mundo durante los últimos meses de este año y en los primeros de 2019. También reinarán los tejidos metalizados, las capas y ponchos y las botas por encima de la rodilla.

El desfile de Chanel en el Gran Palais, además de inolvidable por el bosque otoñal que Karl Lagerfeld recreó a la perfección en el interior del edificio, será una fuente de inspiración inagotable para las grandes firmas de textil y para todas las amantes de tendencias. Sus botas por encima de la rodilla en tejidos metalizados, sus estampados orgánicos, sus trajes de largo a media pierna realizados en tweed en tonos grises y beige, sus capas de pelo, sus conjuntos de piel metalizada y su clásica, pero inmortal, combinación de blanco y negro, darán mucho que hablar. También lo harán los trench efecto plástico de Miu Miu, con una silueta muy ochentera, de cintura marcada y hombros oversize. Sus estilismos de falda midi y prendas de lana y sus looks completos en denim desgastado, compuestos por cazadoras tipo aviador con cremallera y pantalones de cintura alta, serán los reyes del streetstyle.

Además de los abrigos de cuadros, los plumíferos oversize y las cazadoras acolchadas que ya estuvieron presentes en 2017 y que, según la semana de la moda de París seguirán pisando fuerte, el aliado indiscutible contra el frío es el poncho. Stella McCartney, Isabel Marant, Dior y Alexander McQueen son solo algunos de los diseñadores que han incluido esta pieza en sus colecciones.

El reinado del largo midi para faldas y vestidos se confirma; aunque no faltan las minis en su versión más rockera gracias a firmas como Saint Laurent, Isabel Marant o Carmen March. Y también toca asumir que los pantalones cropped, cortados justo por encima del tobillo, son el nuevo pitillo.

Los cuadros y las flores, multicolor, jugando con transparencias o en mix de tejidos; se disputarán el dominio del armario el próximo invierno. Y también el rojo y el naranja, el azul Klein y los colores neón, los rosas en toda su paleta, y la clásica pero infalible combinación blanco y negro, pelearán por dominar el vestuario femenino cuando vuelva el frío.

Los flecos y los lazos, presentes en vestidos, faldas, blusas, abrigos y complementos; son los perfectos aliados para completar un look de traje masculino, una de las tendencias que hay que tener entre la lista de imprescindibles. Como las superposiciones de prendas y tejidos han venido para quedarse, palabra de Balenciaga, ya no hay prendas destinadas solo a la época estival. Por lo menos para las más valientes o menos frioleras. Porque, según John Galliano, Loewe y Chloé, se lleva enseñar la cintura y la cadera también cuando bajan las temperaturas.

En general, la noche se viste de negro, si es con vestidos de mangas abullonadas y con prendas de piel, mejor, según lo presentado sobre la pasarela parisina. Pero hay espacio para los grandes brillos, los estampados multicolor, el print animal y los tonos pastel. Porque si hay algo que permite jugar y encontrar tu combinación ganadora, eso es la moda.