La duquesa de Sussex, Meghan Markle, acompañó ayer por primera vez a la reina Isabel II en una visita oficial a la ciudad de Chester, al noroeste de Inglaterra. Participaron juntas en diversos actos y se mostraron en sintonía. Es la primera vez que la exactriz, de 36 años, acude a un compromiso real sin la compañía de su marido, el príncipe Enrique, con quien contrajo matrimonio en mayo.

Para la ocasión, la Reina lució un conjunto en color verde pistacho con un sombrero a juego. Meghan, por su parte, se decantó por un traje color hueso de Givenchy, que decoró con un cinturón negro. Los actos en Chester incluyen la inauguración oficial del Mersey Gateway Bridge, un puente de seis carriles.