La revista ¡Hola! publicaba que Rafa Nadal y su pareja desde hace 14 años, Xisca Perelló (o Mery, como prefiere ella que la llamen), se casarán en otoño en Mallorca, algo que al tenista no le hizo ninguna gracia. "No voy a contar nada, ya me ha molestado bastante que saliera en prensa...", dijo ayer a Diario de Mallorca, del mismo grupo editor de LA OPINIÓN.

"Nunca informo de nada de esto, no voy a hacerlo ahora", señaló con premura. El manacorí se disponía a entrar en su vivienda de Porto Cristo, ataviado con ropa deportiva y una bolsa de entreno, cuando ofreció estas declaraciones y se permitió, además, bromear sobre el revuelo mediático que se produjo tras desvelarse la noticia: "Quieres preguntarme sobre la boda, ¿verdad?", sonrió. "Entiendo que hagáis vuestro trabajo, pero no voy a decir nada".

Una de las preguntas que muchos se hacen es quiénes asistirán como invitados. En verano se le suele ver con su cuadrilla de amigos de Manacor navegando por aguas de Baleares. Uno de ellos es Marc López, con quien el rey de Roland Garros ha jugado en el circuito de dobles. La Copa Davis le ha brindado lazos con Feliciano López y Fernando Verdasco. La amistad también le une a Roger Federer.