Era una decisión que llevaba mucho tiempo ganando fuerza en los mentideros de internet pero finalmente Disney ha confirmado la compra de la compañía 21st Century Fox por un total de 71.300 millones de dólares (62.840 millones de euros). Se pone así punto final a año y medio de negociaciones tras haber elevado su oferta un 36% respecto de los 52.400 millones de dólares (46.190 millones de euros) pactados a finales de 2017. Un acuerdo que ha convertido a Disney en un auténtico coloso del entretenimiento audiovisual, tras poseer también compañías de renombre como Marvel y Star Wars.

"Se trata de un momento histórico para nosotros", declaró el presidente y consejero delegado de Disney, Robert Iger, subrayando que la combinación de ambas empresas da origen a la "principal compañía global de entretenimiento". Con esta adquisición personajes que ya se han convertido en franquicias millonarias, como Los Simpson, entran a formar parte de un universo que la compañía de Mickey Mouse está dispuesto a explotar en la taquilla y en la pequeña pantalla, como ya se ha visto con los nuevos filmes ubicados en aquella galaxia "muy, muy lejana", y en los héroes de Marvel.

Precisamente, en este último punto, se produce un hecho que refuerza la posición de los personajes enmascarados en el cine. Lejos de la idea de que se ha producido una saturación de superhéroes en la gran pantalla y que esta burbuja esté a punto de explotar, la compra de 21st Century Fox suma nuevas franquicias a Disney cuyos derechos estaban hasta ahora fuera del alcance de la multinacional. X-Men, que este año estrena secuela con Dark Phoenix y Los 4 fantásticos forman ya parte de la compleja red cinematográfica de Marvel, dividida en fases y que este año culmina uno de sus eventos más importantes con Vengadores: Endgame, la secuela de Infinity War.

Todo ello se traduce en que personajes aclamados por la crítica y el público como Lobezno (que hasta Logan estuvo encarnado por Hugh Jackman) o Deadpool (al que da vida Ryan Reynolds), pueden compartir película con el Thor de Chris Hermsworth, el Spider-Man de Tom Holland o el Dr. Extraño de Benedict Cumberbatch. De hecho, el propio Reynolds celebró este acuerdo millonario con una foto en su cuenta oficial de Twitter en la que se observa al personaje que interpreta con unas orejas de Mickey Mouse.

La última película de Vengadores, que llegará a las salas españolas el próximo 26 de abril, pondrá fin al universo de Marvel tal y como lo conocemos e iniciará nuevas historias con héroes ya conocidos y otros que están por llegar, por lo que es muy posible que entre las novedades cinematográficas para los próximos años Los 4 Fantásticos y un nuevo Lobezno hagan acto de presencia en la gran pantalla.

También es destacable señalar que la compra de 21st Century Fox le ha dado a la compañía Disney los derechos de la saga Avatar, la millonaria película del director James Cameron que todavía tiene pendiente de estreno cuatro secuelas.

Ante la tendencia de los últimos años a prescindir de la televisión por cable tradicional en favor de los servicios "a la carta", Disney pretende plantar cara a las nuevas plataformas de streaming, lideradas por Netflix. La empresa ya tiene un servicio de este tipo orientado a los deportes y ligado al canal ESPN, pero a finales de año lanzará otra plataforma orientada a un público más familiar, Disney+, ante lo cual retirará de otros catálogos sus películas y series (como ya ha hecho con Darededvil o The Punisher en Netflix).

Aparte de eso, se mantienen los títulos previstos este año para la gran pantalla con nuevas versiones de Dumbo, Aladdín y El rey León, la cuarta entrega de Toy Story y dos películas que prometen romper récords de taquilla: la ya mencionada Endgame y el episodio IX de Star Wars, que llegará el próximo mes de diciembre.