Un Juzgado de Valencia ha dictaminado que el cantante Julio Iglesias es el padre de Javier Sánchez Santos, de 43 años, en una sentencia que no es firme y que tanto el abogado del artista como la Fiscalía ya han anunciado que recurrirán, y que el demandante ha recibido con "lágrimas y abrazos". El titular del Juzgado de primera instancia número 13 de Valencia ha hecho pública una sentencia en la que considera que los indicios que concurren en este caso "son suficientes" para apreciar esa paternidad.

Entre los indicios, cita la negativa del demandado "a posibilitar la práctica de la prueba biológica", pese a "haber constancia en las actuaciones de que en la época aproximada de la concepción del demandante existieron ciertos contactos y trato entre la madre de este y el demandado". Esos contactos se produjeron en julio de 1975, en una sala de fiestas ubicada en Sant Feliu de Guixols (Girona), "y hacen que no sea inverosímil ni descabellada la posibilidad de haber existido relaciones sexuales entre ellos", argumenta el magistrado. Otros indicios son el testimonio de la madre del demandante, quien aportó durante el juicio "datos concretos sobre la pertenencia, ubicación y distribución interior del chalé" donde Julio Iglesias se alojaba esos días, y el "evidentísimo parecido físico" entre el cantante y el demandante. Sobre este último aspecto, la sentencia señala que "si bien pudiera ser fruto del azar, sin embargo sería una excesiva e improbabilísima casualidad que, teniendo el actor ese gran parecido y habiendo sido concebido en los días aproximados" en que su madre e Iglesias coincidieron en la misma sala de fiestas, "su padre fuera un tercero".

El juicio por la supuesta paternidad de Julio Iglesias quedó visto para sentencia el pasado 4 de julio tras la celebración de una vista en la que únicamente declaró como testigo la madre de Sánchez Santos, la exbailarina María Edite Santos. La sentencia conocida ahora llega veintiocho años después de que Edite presentara una primera demanda de paternidad contra el cantante, que ganó en primera instancia pero luego perdió ante el Tribunal Supremo, a la que siguieron otras dos demandas presentadas por su hijo. El abogado Fernando Falomir, representante legal de Julio Iglesias en este juicio, ha avanzado que recurrirá la sentencia, ya que se basa en una presunta negativa a someterse a una prueba biológica que a su juicio "no es tal", y en cualquier caso se trata de "cosa juzgada". Falomir ha defendido que no hay indicios para determinar la paternidad, sino "una foto de Julio aquel día con otras personas en una sala de fiestas" en 1975, lo que en su opinión "no es suficiente" para señalar que existen indicios de relación.

El abogado del demandante, Fernando Osuna, ha afirmado que Javier Sánchez Santos puede usar el apellido de su padre y heredar cuando muera el cantante y la sentencia sea firme. Según Osuna, el proceso se podría alargar durante tres o cuatro años más, en función de los recursos que presente el abogado del cantante ante la Audiencia de Valencia, el Tribunal Supremo, el Constitucional y el Europeo de Derechos Humanos, aunque ha augurado que fracasarán porque la sentencia está "muy bien fundamentada". La Fiscalía de Valencia ha indicado que recurrirá esta sentencia por coherencia con la postura mantenida durante la vista oral.