Javier Camarena decía que veía improbable que se lo pidieran y que de ser así que pudiera hacerlo porque llevaba un mes con alergia, pero cuando el sábado Una furtiva lágrima en L'elisir d'amore en el Real, el teatro entero le reclamó con sus aplausos el bis y él accedió. Camarena se convirtió así en el único intérprete que hizo en el Real en cuatro ocasiones un bis en una función de ópera y solo otro artista, el barítono italiano Leo Nucci, cantó un bis en ese teatro.