Borja Thyssen-Bornemisza, hijo de la baronesa Thyssen, Carmen Cervera, declaró ayer en el juicio en el que está acusado de fraude fiscal que no presentó la declaración de la renta de 2007 en España "porque no tenía por qué hacerlo" pues entonces "tenía la residencia habitual en Andorra". La fiscal pide que sea condenado a dos años de prisión por un delito contra la Hacienda Pública al no tributar 592.557 euros correspondientes al ejercicio fiscal de 2007 en el impuesto de la renta de las personas físicas (IRPF).

El letrado defensor ha solicitado la absolución al considerar que no cometió dicho delito. Según la fiscal, "Borja Thyssen no presentó en 2007 la declaración correspondiente al IRPF a pesar de que durante ese año residió más de 183 días en España", límite para considerarle obligado tributario en España. Borja Thyssen reconoció que percibió 1.400.000 euros por dos reportajes para Hola con ocasión del anuncio de su boda y del embarazo de su esposa, Blanca Cuesta. Sin embargo alegó que además de que entonces tenía nacionalidad suiza residía de forma habitual en Andorra. Añadió además que ese dinero lo cobró a través de Grobrach, una empresa para gestionar sus derechos de imagen que tenía su domicilio en EEUU y que la cantidad que su sociedad recibió por el contrato lo tributó ante la Administración estadounidense.

Preguntado por qué no realizó la declaración en España durante el ejercicio 2007, fue tajante: "Porque no era residente en España y no consideraba que tenía que hacerlo".