El tenor Plácido Domingo rompió ayer su silencio tras las acusaciones de una veintena de mujeres de acoso sexual conocidas en los últimos meses y antes de su regreso a España, para representar Nabucco. "El abuso de mi posición directiva dentro de la estructura de las Óperas de Washington y de Los Ángeles, donde trabajé, es tan imposible como inconcebible", indicó a ABC. Explicó que "siempre" eran entre tres y cinco las personas involucradas en la toma colectiva de decisiones sobre los repartos y otras medidas artísticas.

Por otro lado, en una entrevista con El Confidencial, aseguró que nunca ha prometido un papel "a cambio de favores". "Cuando me refería a las costumbres de otras épocas en absoluto estaba relativizando el abuso o el acoso, de ninguna manera estaba tolerando ningún tipo de acoso o de abuso", sentenció.