Llevar el cine a los balcones de los berlineses si los berlineses no pueden ir al cine: esta es la premisa de Windowflicks, una iniciativa que se dedica a proyectar películas sobre fachadas de bloques de viviendas para animar la vida cultural de la capital alemana en tiempos de pandemia. Dos veces por semana, Olaf Karkhoff y su equipo montan su proyector y su equipo de sonido en el balcón de un hogar que se haya prestado voluntario para que el vecindario pueda disfrutar sin moverse de casa de filmes como El cielo sobre Berlín, Loving Vincent, Goodbye Lenin o The artist.

"Cuando comenzó la pandemia pensamos que teníamos que hacer algo para que la gente no se volviera loca, para que no tuviera la sensación de estar aislada", explica Karkhoff, arquitecto de profesión y director de un estudio creativo interdisciplinario especializado en proyectos sociales. "Si las personas no pueden ir al cine vamos nosotros a las personas", apunta.