Ante el reconocimiento que el papel de Nairobi le ha otorgado a nivel internacional, Alba Flores admite sentirse "halagada" pero con "miedo", intentando "aprender a manejarlo". La actriz cierra un ciclo en Vis a vis y La casa de papel tratando de asimilar su éxito: "Yo no me dedico a esta profesión por su popularidad".

Con motivo de la participación de la actriz en el último capítulo de la serie Vis a vis, que se despide este lunes tras cinco temporadas, Flores hace balance, en un encuentro virtual, de su último año y del vértigo que supone su exposición y "popularidad" a nivel mundial.

"Me agrada, pero me da miedo. No sé qué supone tanta popularidad. Estoy intentando comprenderlo y ver cuánta popularidad quería yo en mi vida y si quería popularidad", relata al ser preguntada por su sensación al verse representada como Nairobi en un enorme mural pintado en Berlín como homenaje al personaje. "Yo no me dedico a esta profesión por su popularidad, es algo que me vino heredado. Me dedico a ello porque me gusta contar historias".