Silencio en el Palacio de Buckingham. Sin respuesta tampoco ayer del equipo de abogados del príncipe Andrés ante la demanda judicial interpuesta la víspera en un tribunal civil de la ciudad estadounidense de Nueva York contra el hijo de la reina Isabel II por una de las víctimas del pedófilo Jeffrey Epstein.

Virginia Giuffre, de 38 años de edad, acusa al duque de York de haber abusado sexualmente de ella en tres ocasiones, siendo menor de edad, cuando era víctima de una red de tráfico de mujeres organizada por Epstein. La demanda civil en el tribunal de distrito de Manhattan de acuerdo con la ley de víctimas infantiles de 2019 agrava la situación del príncipe, que niega vehementemente las acusaciones.

De acuerdo con los documentos presentados ante el tribunal, los encuentros en los que habría sido forzada a mantener relaciones sexuales con Andrés ocurrieron hace dos décadas, en la casa que tenía en Londres la socia de Epstein, la británica Ghislaine Maxwell; en la mansión de Epstein en Nueva York, y también en la isla privada, que forma parte de las islas Vírgenes, propiedad del multimillonario.

Rico y poderoso

En aquella época, entre los años 2000 y 2002, Epstein, que acabaría suicidándose en la cárcel, abusaba de la entonces menor, que en aquella época se llamaba Virginia Roberts. En la reclamación se afirma que el príncipe mantuvo con ella relaciones sexuales sin el consentimiento de la joven, sabiendo tanto su edad como que “era una víctima de tráfico sexual”.

“En este país nadie, ya sea presidente o príncipe, está por encima de la ley y ninguna persona, da igual lo poco poderosa o vulnerable que sea, puede ser privada de la protección de la ley”, señalan los documentos. “Hace veinte años, el príncipe Andrés, rico, poderoso, con posición y conexiones se permitió abusar de una niña vulnerable y asustada que no tenía a nadie para protegerla”, añaden los letrados en el escrito.

La demandante reclama una indemnización por daños y perjuicios. El duque de York podría verse forzado a someterse a interrogatorio bajo juramento y a entregar mensajes de texto, correos o cartas privadas. Es altamente improbable que viaje a Estados Unidos.

No recuerda los encuentros

En una entrevista mantenida con la BBC en el año 2019 después de que saltara el escándalo Epstein, Andrés dijo no recordar ningún encuentro con Giuffre, aunque aparece sonriente en una foto incriminatoria agarrando por la cintura a la jovencísima chica, junto a Maxwell, que está considerada como la proveedora de la red de menores y que permanece encarcelada desde hace un año en Nueva York a la espera de juicio.