El deán de la Catedral de Toledo, Juan Miguel Ferrer, dimitió de su cargo tras la polémica surgida a raíz del videoclip Ateo de C.Tangana y Nathy Peluso grabado en el templo toledano y la discrepancia de opiniones inicial con el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves.

El Arzobispado de Toledo informó ayer de la decisión de Ferrer. Según el comunicado, el arzobispo y el deán de la catedral se reunieron en “un encuentro cordial” en el que el deán “manifestó su plena comunión con Cerro Chaves y con la Iglesia Diocesana”. El deán también pidió “perdón institucional” en su nombre y en el de las diversas instancias del cabildo “en la medida en que han tenido responsabilidad, por cuantos errores y faltas se hayan podido cometer de palabra, obra y omisión en los hechos de los últimos días”.

El Arzobispado también quiso precisar que, por normativa interna del cabildo “vigente desde hace años”, el dinero recaudado por actividades extraordinarias de la catedral va destinado a obras sociales.

La dimisión de Ferrer —que ocupaba el cargo de deán en la catedral de Toledo desde noviembre de 2016— se produce tras la polémica generada a raíz de la grabación del videoclip Ateo de C.Tangana y Nathy Peluso, en el que ambos artistas aparecen bailando una bachata en actitudes sensuales dentro del templo, incluida la Sala Capitular.

Tras el malestar que comenzó a manifestarse en redes sociales desde el mismo día de su publicación, el pasado viernes, 8 de octubre, Juan Miguel Ferrer justificó la grabación del videoclip al afirmar que la canción “presenta la historia de una conversión mediante el amor humano” y se apoyó en la letra de la misma: “Yo era ateo, pero ahora creo, porque un milagro como tú ha tenido que bajar del cielo”.