Antonio David Flores y Olga Moreno se separan después de más de dos décadas de amor. Así lo aseguró en su portada la revista Lecturas, confirmando un rumor que llevaba varios meses circulando por las redacciones. Una separación que sus protagonistas han intentado hasta el último momento que no trascendiese en su afán por preservar la tranquilidad de su familia, que al parecer ya estaría al tanto de su ruptura.

Una ruptura que se produjo hace prácticamente un año y en la que Olga se reafirmó a su regreso de Supervivientes, cuando fue consciente de que su matrimonio la perjudicaba tanto en el plano público como en el personal. Según desvela la publicación, su relación sigue siendo buena y continúan compartiendo casa en Málaga, aunque Antonio David lleva un mes en Madrid centrado en la guerra judicial que emprendió tras la emisión de la docuserie de Rocío Carrasco, que le dejó demasiado tocado y “sin fuerzas” para intentar reflotar un matrimonio que hacía aguas por todos lados. Fuentes cercanas afirman que no habrá ningún problema con la hija que tiene en común el matrimonio, Lola, de 8 años.

Según cuenta Lecturas, la ruptura se precipitó con el regreso de Antonio David a televisión. La aparición en Sálvame de varias supuestas examantes —que contaron con todo lujo de detalles su aventura con él— supuso una “humillación” para Olga, que tampoco entendió la actitud impasible de su marido con estos testimonios.