Custo: “Sería un plus colaborar con Rosalía”

Custo ha regresado a su capital fetiche: Nueva York. En la Semana de la Moda clavó una pica Ángel Custodio Dalmau Salmons (Tremp, Lleida, 1959) en 1997, cuando la New York Fashion Week (NYFW) empezaba a despuntar frente a citas decanas como París y Milán. Custo fue el único europeo invitado y el New York Times cayó rendido a los pies de lo que bautizó como la customanía.

El mundo entero tenía que conocer a ese catalán que sedujo con sus camisetas cool a los estilistas de series como Friends y Sexo en Nueva York y a un ramillete de actrices y celebridades de Hollywood. Desde entonces, la historia de amor de Custo con Nueva York y el mercado estadounidense no ha hecho sino fortalecerse (allí vivió también el revés del 11-S), pues es su mercado principal y donde el diseñador suele presentar sus nuevas creaciones. Justo en la víspera de San Valentín, Custo volvía a conquistar la ciudad de los rascacielos con Welcome to the Other Side, su colección para el próximo otoño e invierno.

Custo conoce bien a su público más fervoroso y en su 51º desfile ha salido a darles lo que esperan de él: “Mucho entusiasmo y un trabajo muy riguroso sobre nuestra genética, sobre cómo mantenerla y al mismo tiempo cambiarla y refrescarla”. “Se trata de seguir siendo los mismos pero de una forma distinta”, recalca el diseñador catalán de la eterna juventud y del espíritu libre y revolucionario.

Nuevas prendas

Aunque Custo se confiesa fan de la música electrónica de Jean-Michel Jarre, reconoce que el título de su colección, y del álbum homónimo de 2021 del compositor francés, es solo pura coincidencia. La expresión le ha servido para sintetizar el espíritu de las nuevas prendas que presenta, donde “la funcionalidad, estética y comodidad se unen a la creatividad con una clara apuesta por los volúmenes y el colorido, y una arriesgada selección de materiales”, marca de la casa desde hace más de cuatro décadas.

Custo afirma que busca “la emoción y la sorpresa” en su público. “Las piezas tienen un componente muy emotivo. Al final es lo que la gente espera de nosotros y es lo que le ofrecemos”, dice con orgullo. “Entendemos que nuestra ropa no es absolutamente necesaria, sí es funcional, pero no indispensable”, reconoce Custo, que hace un mes se ha embarcado en otro proyecto, con una colección compuesta por 10.000 obras digitales inspiradas en 118 de sus estampados más icónicos.

Custo se sabe un referente en la capital norteamericana de la moda, adonde otra joven catalana universal no deja de triunfar. Rosalía, la diva total, que hace unas semanas despuntó en el desfile de Louis Vuitton en París. “Nos haría mucha ilusión poder vestir a Rosalía, un gran referente. Sería un plus importante poder colaborar con ella. Nos encantaría poder tener la oportunidad algún día”, confiesa, ya que, a su juicio, “una gran variedad de sus diseños le quedarían muy bien, además, creo que nuestra colección está alineada con sus valores”.

“Esta colección que presentamos en Nueva York es una versión más reducida de la que mostraremos en Madrid (el próximo sábado) y Barcelona. En la capital española habrá 12 salidas más. “Esta vez se ha hecho un trabajo fuerte con los plumones técnicos oversize de aspecto metalizado aunque con tejidos suaves”. También se han visto pantalones sobredimensionados y minifaldas que combinan con atrevidos tops.