El nuevo ‘toy boy’ de Madonna es boxeador

La reina del pop anuncia que Josh Popper es su nueva ilusión

Madonna y Josh Popper, junto al cuadrilátero.    | // INSTAGRAM

Madonna y Josh Popper, junto al cuadrilátero. | // INSTAGRAM

luis miguel marco

Tras romper hace unos días con el modelo y bailarín Andrew Darney, de 23 años, Madonna tiene un nuevo acompañante. Su nueva conquista tiene un aspecto más duro que los anteriores. Más tipo Rocky. De hecho es un boxeador que tiene 29 años y que, según afirman medios estadounidenses, entrena a uno de los seis hijos de la cantante en su gimnasio, Bredwinners, de Nueva York.

La reina del pop ha recurrido a sus historias de Instagram —la forma que usa para mandar mensajes al mundo— para anunciar que Josh Popper es su nuevo big toy boy. En las imágenes, que ya han sido borradas, ella, que viste pantalones cortos de color rosa sobre medias de rejilla y un top de malla con corpiño de encaje, abraza al joven mientras le besa en el hombro. “¿Por qué es tan imposible de creer: que tenemos tantas cabezas como monstruos, brazos como dioses, tantos corazones como ángeles?”, escribió la cantante junto a la primera instantánea. La cita corresponde a la novela de Andrew Sean Greer Las vidas imposibles de Greta Wells, que trata sobre una mujer que es transportada a otras vidas que podría haber vivido.

La diva traerá su The Celebration Tour a Barcelona el 1 de noviembre y ese espectáculo, con el que festeja con sus seguidores sus 40 años de trayectoria artística, será también un vistazo a cómo Madonna ha explotado como nadie la ambigüedad de los roles sexuales para llevarlos a su terreno, que excede con creces el de la industria. Pero no es cierto como se dice muchas veces que esté de vuelta de todo y que todo le resbale. Basta recordar un hecho relevante ocurrido en la gala de entrega de los Grammy, cuando Madonna presentó la actuación del británico Sam Smith y la alemana Kim Petras, la primera mujer trans en subir al escenario en estos galardones. En vez de hacerse eco de un discurso en el que daba las gracias por la “valentía” de estos artistas en defender los derechos LGTBI, muchos optaron por hablar de lo rara que se veía a Madonna en las fotos. Según la cantante, eran un primer plano, con cámara de lente larga que “distorsiona la cara de cualquiera”.

Ella se veía obligada a contratacar. “Una vez más estoy atrapada en el resplandor de la discriminación por edad y la misoginia que impregna el mundo en el que vivimos. Un mundo que se niega a celebrar a las mujeres mayores de 45 años y siente la necesidad de castigarla si sigue siendo fuerte, trabajadora y aventurera”, afirmaba en un post de Instagram. “Nunca me he disculpado por ninguna de las elecciones creativas que he hecho ni por la forma en que me veo o me visto, y no voy a empezar. Los medios me han degradado desde el comienzo de mi carrera, pero entiendo que todo esto es una prueba y estoy feliz de ser pionera para que todas las mujeres detrás de mí puedan tener un tiempo más fácil en los años venideros. En palabras de Beyoncé: No me romperás el alma”, añadía.