Enrique podría ser deportado de EE UU

Una fundación conservadora exige saber si mintió sobre las drogas tras las declaraciones del príncipe en las que admite haberlas tomado

El príncipe Enrique, durante una intervención en Naciones Unidas, en Nueva York, el pasado julio.  | // EFE

El príncipe Enrique, durante una intervención en Naciones Unidas, en Nueva York, el pasado julio. | // EFE / Laura estirado

Laura estirado

No solo ha dado pelos y señales en explosivas memorias, En la sombra, sino que el príncipe Enrique ha seguido aportando detalles sobre su relación con las drogas en varias entrevistas y platós de televisión. La última, a principios de mes, en el diván del polémico médico Gabor Maté, perseguido en Canadá por recomendar drogas a sus pacientes, soltó: “Empecé a consumir drogas de forma recreativa y descubrí lo buenas que eran para mí”. Este tipo de declaraciones han levantado ampollas entre los activistas antidrogas en el Reino Unido. Y ahora otra asociación está mirando con lupa si el hijo pequeño del rey Carlos III mintió para obtener su visado, lo cual sería motivo para ordenar su deportación.

Se trata de la Heritage Foundation, una fundación conservadora con sede en Washington DC, que quiere que las autoridades estadounidenses hagan pública la solicitud de visa del duque de Sussex para determinar si se le pidió que revelara algún uso de drogas. En sus memorias, el royal describe su experiencia con diversas sustancias. Dice haber probado la cocaína, el cannabis y los hongos alucinógenos. Cuenta que su primer contacto con la coca fue un fin de semana a los 17 años, aunque más tarde repitió varias veces. También admite haber tomado drogas alucinógenas en un evento con famosos en California y haber fumado cannabis después de su primera cita con la entonces actriz Meghan Markle.

Mike Howell, director del proyecto de supervisión de la fundación, ha contado al “Daily Mail”: “Esta solicitud es de interés público a la luz de la posible revocación de la visa del príncipe Enrique por el uso de sustancias ilícitas, sobre si se le preguntó por este asunto y si se le investigó debidamente antes de entrar a EE UU”. Este tipo de información sobre drogas y narcóticos se pregunta en el cuestionario para obtener el certificado. El departamento de Inmigración de EE UU tiene una de las penas más duras por mentir en dicha solicitud. Tanto que si alguien es pillado incurriendo en falsedad se contempla la posible deportación y se le impide solicitar la ciudadanía. La prensa británica ha visto aquí un nuevo filón, en un momento en que los índices de popularidad de Enrique y Meghan están a la altura del betún, por detrás del príncipe Andrés.

El matrimonio reside en California desde 2020 decidiera abandonar sus deberes como miembros de la familia real británica. Tras una breve etapa en Canadá, los duques de Sussex se mudaron a una mansión en Montecito (California), donde viven con sus dos hijos, Archie Harrison, de 3 años, y Lili Diana, de 1, y desarrollando una carrera profesional enfocada en los medios de comunicación, series, documentales, libros..., y a través de su fundación solidaria.

Pese a las pésimas relaciones con la familia real, la pareja ha sido invitada a la coronación del rey Carlos III el próximo 6 de mayo. Algunos medios siguen dudando de su asistencia.