El actor barcelonés, de 36 años, vuelve al género policiaco -esta vez en serio, tras la taquillera 'Anacleto, agente secreto'- y lo hace de la mano de un icono del género: el inspector Bevilacqua creado por Lorenzo Silva para sus exitosa serie de novelas. En 'La niebla y la doncella', investiga el asesinato de un joven vividor en el que se ve envuelto un político, en la isla de la Gomera.

¿Se castiga en el gimnasio?

Inevitablemente. me sirve como válvula de escape.

Si no fuese actor sería...

Tal vez fotógrafo. Se ha convertido en una pasión.

¿Le interesa el género policiaco?

Me interesa lo que les ocurre a los personajes que debo interpretar. Y Bevilacqua es complejo y lleno de matices, lo que más me apasiona.

¿Lo mejor y lo peor de un rodaje?

Lo mejor, esos momentos en los que debes acelerar de 0 a 100 en cuestión de minutos. Lo peor, las esperas, el frío y los madrugones.

Dicen que su profesión es facilita€

Ya. No sé de dónde lo sacan. Yo no me tomo dos horas para comer, como en otros trabajos. Yo trasladé la dinámica de estudio de la universidad a la preparación de los personajes y me gusta investigar sobre lo que debo hacer y ensayar lo que haga falta para llegar a lugares incómodos. De fácil nada.

¿No le da miedo herirse sin querer?

Me gusta la investigación emocional. No temo meterme en terrenos pantanosos. Soy muy sano psicológicamente. He hecho mi proceso de autoconocimiento y eso me da herramientas para saber hasta dónde puedo llegar.

Empezó de chaval, ¿el trabajo ha interferido su viaje a la madurez?

Esta es una profesión que utilizada correctamente te puede hacer muy apto para una vida feliz. Hay muy poca rutina, pero hace más difíciles las relaciones personales por los viajes. A la vez, eso te aporta flexibilidad y adaptación, que son muy útiles en estos tiempos.

Viendo Abracadabra de Berger se le ve a gusto haciendo comedia.

Si es inteligente, como Abracadabra, es un buen lugar para estar, pero no siempre. No me gusta ocupar el mismo sitio durante mucho tiempo.

¿Hay vida más allá de su trabajo?

Por supuesto. No soy sólo actor. Me gusta cultivar otros campos de conocimiento, me gusta escribir y soy un lector voraz y en idiomas distintos.

No da puntada sin hilo€

Me gusta aprovechar el tiempo. Prefiero que me critiquen por probar cosas nuevas que reprocharme no haberlo intentado.

También se ha acercado al mundo de la moda, de lo estético.

He tenido un vínculo con esto desde muy joven. Me divierte.

¿Es ave nocturna?

Ya menos. La naturaleza se rebela y soy algo excesivo en el festejo. Cuando salgo lo doy todo. Soy bastante intenso.

¿Cómo es su casa?

Hay muchos muebles antiguos. Los padres de mi primera novia se dedicaban al diseño de muebles y me apasioné por ello. Me gusta el vintage de los cincuenta, buscar piezas...

Es usted un curioso€

Casi compulsivo. Y es lo que me gustaría trasmitir a mis hijos, como yo heredé de mis padres. Estimula la capacidad para disfrutar.

¿Y qué le enfada?

El aturullamiento informativo. Me causa una continua sensación de alerta que no me gusta. Desde hace un tiempo practico la ignorancia selectiva. Necesito mantener una perspectiva positiva de la vida.