Las cremas perfeccionadoras BB cream fueron la punta de lanza de una cosmética que se caracteriza por la casi obsesión de una piel perfecta. Después llegaron las mascarillas para todo, con envoltorios divertidos y con un punto naif; los maquillajes cushion que ahora impregnan también correctores de ojeras y pintalabios, y ahora la apuesta por lo eco, con marcas veganas y productos 100% libres de toxinas. La fiebre por conseguir las últimas propuestas made in Corea estimuló el comercio electrónico, pero la aparición de tiendas especializadas como Miin (en Madrid y Barcelona) o la más reciente apuesta de Sephora ayudan a conocerlas mejor y probarlas de primera mano.

El turismo de belleza, que lo hay, no se pierde el barrio de Myeongdong, en Seúl, donde se agrupan las tiendas y se ve lo más nuevo, como las mascarillas de cerámica y luz pulsada, las mascarillas corporales (para cintura, brazos, pecho€) o las tiendas de lentillas de mil colores.