Llegan las Navidades y con ellas, las compras, el estrés, la comilonas y por supuesto las copas de más. Si quieres que las noches sean alegres pero las mañanas tan especiales como Navidad o Año Nuevo también, toma nota de los siguientes consejos:

-Cena y desayuna mucho: Muchas investigaciones han demostrado que beber con el estómago vacío hace que las resacas sean peores, ya que el alcohol se absorbe más rápido. También es aconsejable que tras la noche de fiesta y antes de meternos en la cama comamos algo antes, preferiblemente frutas y especialmente las que contienen vitaminas C.

-Bebe agua: Una de las consecuencias de tomar más alcohol de la cuenta es que nos deshidrata, por ello es recomendable que entre copa y copa vayas bebiendo tragos de agua. No conseguirás que la resaca desaparezca del todo pero atenuarás mucho esa sensación tan desagradable del día después.

-Evita fumar: Es evidente que una cosa lleva a la otra y una noche es una noche pero sé consciente de que el tabaco agrava las resaca, ya que esta mezcla potencia la secreción de dopamina.

-Duerme mucho y tarde: El alcohol altera los ritmos circadianos. Por ello es aconsejable meternos a la cama con la menor cantidad en el cuerpo posible. Aprovecha para darte un paseo y despejarte, desayunar con fuerza, etc. Una vez que te vayas a acostar, procura que sea en la oscuridad más absoluta e intenta que nada pueda estropearte el sueño, ya que si te desvelas no lograrás recuperarte en buen estado. Descansar y dormir mucho tiempo es lo más productivo que puedes hacer por ti un día de resaca.

-Ten cuidado con los medicamentos: Si al día siguiente estás mal no recurras corriendo a la caja de medicamentos. La socorrida aspirina por ejemplo te irritará aún más el estómago y el ibuprofeno te calmará el dolor de cabeza pero no te paliará el resto de síntomas.

-Duchate con agua fría: Si al día siguiente tienes compromisos ineludibles opta por darte una ducha bien fría. Conseguirás despejarte de forma eficaz y sentirte refrescado.

-Haz deporte: Aunque parece lo menos apetecible para un día de resaca, practicar actividades deportivas te ayuda a eliminar las toxinas nocivas de tu cuerpo. Además, aumenta la circulación en sangre y oxigena el cerebro, tan perjudicado por los efectos del alcohol.