La enfermedad de Kawasaki es una inflamación generalizada de las arterias que se produce en niños menores de cinco años, una patología rara similar al shock pediátrico, que se está relacionando con niños que han tenido la Covid-19.

Las autoridades sanitarias del Reino Unido alertaron días atrás de la detección de una nueva enfermedad inflamatoria que afecta a niños de todas las edades y podría estar relacionada con la enfermedad que provoca el nuevo coronavirus. Esta patología, añadieron estas fuentes, tiene una epidemiología más grave que la Covid-19 y comparte síntomas del shock pediátrico y la enfermedad de Kawasaki.

La Organización Mundial de la Salud consideró este miércoles anecdóticos los casos registrados de niños con cuadros graves de shocks pediátricos tras contraer la Covid-19. "En algunos casos se ha informado de síndromes inflamatorios parecidos al síndrome de Kawasaki, pero en muy pocos pacientes y solo en un par de países", señaló la OMS.

La Asociación Española de Pediatría (AEP), en una nota sobre casos de shock pediátrico, ha llamado a la calma a las familias y ha asegurado que los pediatras están alertados sobre esta circunstancia. "Los casos de shock en niños que están coincidiendo temporalmente con la epidemia de Covid-19 son muy infrecuentes", añaden los pediatras.

La Fundación Española del Corazón (FEC) informa en su web que la enfermedad de Kawasaki es una vasculitis que produce una inflamación generalizada de las arterias del organismo y aparece normalmente en menores de cinco años.

Su complicación más temida es la aparición de aneurismas coronarios que se dan hasta en el 20% de los casos si no se administra el tratamiento adecuado. Es una enfermedad rara con una incidencia de 90 casos por cada 100.000 niños en Japón, y en Europa mucho menor, 30 o 40.

Es una de las principales causas de enfermedad cardíaca adquirida en niños en los países desarrollados.

La FEC añade que se desconoce la causa de la enfermedad de Kawasaki, pero se sospecha que puede haber un componente genético que condiciona una reacción inmunológica excesiva después de una infección por un agente que tampoco se conoce, pero puede ser probablemente un virus.

Los síntomas de esta patología son fiebre durante más de cinco días, sarpullidos, nódulos linfáticos inflamados, ojos enrojecidos y labios, garganta y lengua también inflamados. El tratamiento inicial consiste en aspirina e imunoglobina a dosis altas.