Los centros educativos de Reino Unido se han unido para limitar el consumo de videojuegos violentos o con contenidos sexuales en los menores y han amenazado a los padres con denunciarlos a la Policía si se descubre que permiten que sus hijos accedan a títulos calificados para mayores de edad, como 'Call of Duty' o 'Grand Theft Auto'.

Se trata en concreto de 15 centros de educación primaria y un instituto de Cheshire que han enviado una cara a los padres de sus respectivos alumnos para advertirles de que los juegos para edades inapropiadas ueden incrementar los "comportamientos sexualizados precoces", según el diario 'The Independent'.

En al carta, puede leerse que "algunos niños han informado de que juegan o ven videojuegos para adultos que son inapropiados para su edad y han descrito el nivel de violencia y contenido sexual que han presenciado".

Además, la advertencia cita a una serie de juegos concretos, como 'Call of Duty', 'Grand Theft Auto', 'Dogs of War', aunque se extiende a todos los títulos con similares características y cuya clasificación es para mayores de 18 años.

La facilidad con la que los más pequeños acceden a contenidos violentos es una de las preocupaciones que también recogen las autoridades y fuerzas del orden locales, quienes han aconsejado a los profesores de estos centros que avisen a la Policía o a Servicios Sociales.