Los fuertes vientos vividos en A Coruña en las últimas horas han tenido un efecto secundario inesperado. Justo al término de la Navidad la famosa bola de la Marina ha cedido y se ha roto por una de sus bases.

En la mañana de este miércoles los operarios de la empresa Iluminaciones Ximénez estaban trabajando en su retirada.