Eduardo Rial es uno de los tres únicos supervivientes por el momento del Villa de Pitanxo. Llevaba 5 años embarcando en este barco. Su novia no ha podido aún hablar con él. Pero está vivo, no pide más. Su última llamada fue antes del accidente. Iba a trabajar. "Lo último que me dijo fue que hacía muy mal tiempo... Dicen que fue un golpe de mar". Confiesa que si puede lo convencerá para no volver al mar. Eduardo iba en la barca con su tío Juan Padín, el capitán, superviviente también. Juan iba a jubilarse en breve. Su sueño era dedicarse a una casa rural en Hío, su pueblo. Llevaba desde los 16 años en el mar. Son momentos muy duros para el resto de familias que no saben nada de los suyos. "Tenemos la suerte de tener a los nuestros vivos pero los demás también lo están sufriendo", nos cuenta otra familiar de Juan. El tercer superviviente se llama Samuel Kwesi Koufie, de 30 años, Es de Ghana, lleva 10 años en Galicia y tiene 5 hijos en su país. Su sueño es traerlos a España.