El primer viaje del nuevo canciller alemán, Olaf Scholz, ha sido a Francia. Es la costumbre, y además quiere reforzar así el eje francoalemán al frente de la Unión Europea. Scholz y Macron han hecho bandera del europeísmo frente al nacionalismo en auge en todo el continente. El presidente francés ha subrayado que sus visiones sobre la construcción europea son muy parecidas.