En su resolución, el Supremo rechaza la semilibertad de Junqueras y el resto de condenados por el 'procés' y destaca que se trata de una medida prematura y que necesita más tiempo para ver la evolución de los presos. El alto tribunal recuerda además que son condenas elevadas, que oscilan entre nueve y 13 años de cárcel y que ninguno ha cumplido la mitad. El president en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, ha calificado la respuesta de los magistrados de “insulto a todos los demócratas”. Pero más allá de la situación penitenciaria, los autos defienden la sentencia y señalan que ninguno de los acusados ha sido condenado por perseguir la independencia de Cataluña.