El sueldo que percibe el Rey por el ejercicio de sus funciones se mantiene en 253.000 euros anuales brutos, la misma cantidad que el pasado año. Don Felipe congela su asignación, también la de la Reina Letizia, casi 140.000 euros, y la de su madre, la Reina Sofía, que recibirá 114.000 euros. Pero la novedad de estos presupuestos es que por primera vez no hay asignación para su padre, el Rey emérito. Don Felipe ya se la retiró en marzo debido a la situación judicial de Don Juan Carlos, y así se queda este año. La Casa Real destina ahora los casi 200.000 euros que cobraba a otras partidas, como el proceso de digitalización de Zarzuela, de modo que el presupuesto total se mantiene en los 7,8 millones. Casi la mitad de este dinero se destina a los gastos del personal. La Princesa Leonor y la infanta Sofía no tienen todavía retribuciones públicas.