El nombre de la ministra y la dirección de su departamento en el sobre están manuscritos y la procedencia, indicada en el sello con un código QR: El Escorial, 21 de abril. La propia Reyes Maroto ha mostrado el contenido tras denunciar la amenaza. Una navaja de tamaño medio con manchas rojas. Se investiga si son de sangre o de pintura. Quien preparó el paquete la puso entre dos cedés tratando de dificultar su detección por los escáneres de seguridad y la acompañó con una carta también manuscrita aunque ilegible, según consta en la denuncia, y con varios mensajes impresos de Whatsapp. No ha sido complicado, nada complicado, dar con el remitente. Había escrito su nombre real y su dirección en el sobre. Se trata de un hombre que padece una enfermedad mental. La Policía le ha identificado y la investigación está ya en manos de un juez. Antes de conocerse ese origen de la amenaza el episodio ha saltado a la campaña del PSOE y a la del resto.
