En la administración número 4 de Granada ya dieron el gordo hace 23 años. A las puertas de ambas administraciones se han vivido celebraciones ruidosas pero con el punto de prudencia que exige la pandemia. En el caso de Punta Umbría, la fortuna alivia en cierto modo las penurias de una población cuya economía se basa en el turismo, sector especialmente golpeado por las restricciones que impone la COVID. Para Granada es también un premio providencial, ya que se trata de la provincia de Andalucía más castigada por el coronavirus.