Un brote de gripe aviar en una macrogranja de Valladolid ha obligado al sacrificio de más de 130.000 gallinas ponedoras en el municipio de Íscar. El brote comenzó a principios de semana con la muerte de varias de estas gallinas que vivían enjauladas. Se trata del segundo brote de esta enfermedad que se detecta en Castilla y León en menos de un mes.