Hacer correctamente una reanimación cardiopulmonar no es tarea fácil, pero si encima la víctima pesa 3.000 kilos, es una misión casi imposible. Empleando todo su cuerpo, veterinarios y voluntarios tratan de salvar a una mamá elefante en un heroico rescate en el Parque Nacional Khao Yai de Tailandia. Según los funcionarios, una cría de apenas un año de vida cayó en el agujero de un desagüe. La madre del pequeño no se apartó de su lado hasta que llegaron los rescatistas. Estos usaron inyecciones para anestesiarla y poder sacar de allí a su cría. La anestesia acaba haciendo caer también a la elefante al hoyo. Los rescatistas se ven obligados a usar una grúa para levantar al gigante mamífero, pero el estrés puede con ella y se acaba desmayando. Finalmente consiguen salvar a la madre, que tras unos intensos minutos de reanimación, logra volver junto a su cría a la naturaleza. Es una historia dramática pero que afortunadamente solo acabó con las lágrimas de felicidad de sus salvadores, satisfechos con un trabajo bien hecho.