Los controles en las zonas de 30 kilómetros por hora multan solo a uno de cada cien vehículos

Los controles de la Policía Local en las tres áreas de la ciudad con un tope de velocidad permitido de 30 kilómetros por hora realizados a lo largo de 2013 acabaron con multas a un total de 29 conductores que sobrepasaban tal máximo. Es, en total, solo el 1,3% de los automóviles que fueron vigilados por el 092. El piloto que batió el récord fue sorprendido circulando a 74 kilómetros por hora, 44 por encima de lo autorizado, en Novo Mesoiro.

Las zonas con esta limitación son Novo Mesoiro, Matogrande, Os Rosales y Adormideras. El primer ensayo se realizó en este último barrio junto a San Amaro hace diez años, en Navidad de 2004, y después se extendió al resto, con la intención de dar prioridad a los peatones. La Memoria de la Polícía Local de 2013 señala que se ejecutaron un total de 10 controles a lo largo del pasado ejercicio: tres en la avenida de Novo Mesoiro, seis en Manuel Azaña en sentido ronda de Outeiro, uno en la calle Regata Cutty Sark (Adormideras) y ninguno en Matogrande.

En el caso de Novo Mesoiro, fue fiscalizado el paso de 814 vehículos, con un total de siete denuncias, un 0,9%. Ninguno de los conductores superó la velocidad en tal grado como para abrir diligencias penales (96 kilómetros por hora), pero sí uno de los coches controlados llegó a los 74. La velocidad media de los vehículos es superior a la permitida, de 44 kilómetros por hora.

El presidente de la asociación de vecinos, Manuel Francisco Méndez, describe que la situación es "un escándalo" y constata que hay "muchos" conductores que no respetan el límite, además de otras infracciones como los que se "saltan la línea continua para ir a un supermercado". "Nueve de cada diez no lo respetan", añade el portavoz vecinal, que añade que han solicitado al Ayuntamiento la construcción de una mediana en la avenida y la colocación de badenes de gel "que se ponga duro cuando los conductores pasen a una velocidad excesiva". Ante estos problemas -"si no fuese por los carteles, esta zona sería el salvaje oeste"- piden también más carteles de velocidad, de acceso y de señalización en general.

En Adormideras se realizó un control, concretamente, en la calle Regata Cutty Sark. De los 96 vehículos afectados, tres fueron sorprendidos quebrantando la normativa y sancionados. La velocidad media de los vehículos es de 37 kilómetros por hora, también por encima de lo permitido. El automóvil que menos respetó el tope recorría la vía a 66.

El presidente de la asociación vecinal de Monte Alto, Alberte Fernández Mariño, declara que en esa zona nunca recogieron quejas y que, por tanto, parece una medida efectiva. Sí en otros puntos del barrio como la ronda de Monte Alto. Cree que estaría bien analizar extender la Zona 30 a otros lugares. "Nosotros lo que decimos es que en los pasos de peatones, sí que se necesitan bandas rugosas", solicita, "que cuando los vehículos lleguen a los pasos de peatones tengan que reducir la velocidad porque a veces pasan muy rápido".

La memoria de 2013 de la Policía Local realizó el mayor número de controles de estas vías de Zona 30 en la calle Manuel Azaña, de Os Rosales, donde la velocidad media según dichos registros es de 39 kilómetros por hora, de nuevo sobrepasando lo autorizado. En total, realizaron 19 denuncias, el mayor porcentaje de los tres barrios (1,5%). El peor infractor, un piloto que puso su vehículo a 68 kilómetros por hora.

El presidente de la asociación, Fernando Carrillo, también demanda mayores medidas de control, porque "es una zona con grandes avenidas y hay que limitar la velocidad de alguna manera porque se suele circular con bastante más velocidad que los 30 kilómetros por hora". "Hay bandas rugosas pero actualmente a muchas le faltan partes y no las han repuesto", relata, "hay que tener en cuenta que en este barrio hay tres colegios con más de mil alumnos".