El examen mundial de Dan Río

Habla chino, escribe un blog, dirige una empresa de entrenamiento personal en Oleiros y en los próximos días viajará a Jakarta (Indonesia) para participar en el Mundial de wushu. Él es Dan Río y a sus 27 años solo quiere seguir cumpliendo retos.

Nació en Lugo pero ya hace mucho tiempo que se asentó en A Coruña, donde estudió Ciencias de la Actividad Física y del Deporte. Aquí llegó siendo un amante de las artes marciales y esa pasión no ha hecho más que crecer. "Empecé con 17 años, cogí el wushu con intensidad", confiesa, a la vez que aclara que "se conoce como kung-fu, aunque es un nombre comercial que significa grado de maestría". El joven compite en la especialidad de taolu (exhibición) aunque también hay combates, conocidos como sanda. A pesar de ser una disciplina de origen chino, está asociado al judo por cuestiones administrativas.

De la selección gallega, Río saltó a la española, con la que fue campeón nacional, y en su palmarés destaca el oro europeo. Ahora afronta la cita mundialista con mucha ilusión. "Llevamos entrenando cinco meses. El camino es largo y tedioso", comenta. Junto a él viajarán otros tres gallegos: André Fandiño, José Manuel Ferreira y Ezequiel Gago. El resto del combinado nacional lo conforman Raúl Morales y Francisco García (Madrid), Rosario Bonet (Islas Baleares), Sergio Rus y Mario Sánchez (Castilla La Mancha) y Esteban Giménez (Valencia). Los técnicos José María Guardiola y Pablo Ortega se encargan de dirigir el grupo.

Todos ellos se reunieron en Madrid para trabajar y no dejar ningún cabo suelto de cara al Campeonato del Mundo, que se celebra del 12 al 19 de noviembre. "Son como controles", añade. No todos competirán en la misma categoría porque además de individual, en la que participa Dan, hay pruebas para parejas, equipos y de combate (en las que hay eliminatorias). En su modalidad, el gallego deberá realizar una rutina de movimientos de combate con o sin arma. "Lo afrontamos con garantías, aunque siempre hay molestias y lesiones pero estamos todos bien", asegura.

El objetivo es "quedar entre los diez mejores del mundo". Ambicioso, por supuesto, como lo es Dan Río. Este es uno de los múltiples retos que se plantea ya que piensa seguir dando guerra durante muchos años. De momento, enseñará su wushu al resto del planeta.