“En el momento no me lo creía, solo quería abrazar a Rosa”

A caballo entre A Coruña, donde entrena, y Oleiros, donde vive, transcurre la vida de Lucas Yáñez. Dedica 25 horas a la semana a su gran pasión, el patinaje artístico, que comparte con su entrenadora del Club Maxia, Rosa García. Fue la primera a la que abrazó tras proclamarse campeón del mundo júnior en la capital de Paraguay, Asunción. Una efusiva celebración que refleja la complicidad que existe entre ambos: “En el momento no me lo creía, solo quería abrazar a Rosa”.

¿Pudo pegar ojo con la emoción?

Al acabar el campeonato nos fuimos corriendo al hotel porque mis compañeros tenían que descansar. Aún no me lo creía y no he podido dormir mucho, pero todo bien.

¿Lo va asimilando poco a poco?

Me lo voy creyendo un poco más. En la entrega de medallas [la pasada madrugada], ahí ya me lo creeré del todo.

¿Fue el mayor subidón de toda su vida?

Sí, es un momento inexplicable, la verdad, que no se puede explicar con palabras. En ese momento no me lo creía, solo quería abrazar a Rosa.

¿Parte de la medalla es de ella?

Por supuesto. Esta medalla no es solo mía, es mitad mía y mitad de Rosa, ya que me aguanta en todos los entrenamientos, me saca adelante y me apoya. Todo el mérito es suyo también. Estoy muy agradecido.

Menudo abrazo le dio.

Sí. No me lo podía creer. Estoy muy agradecido a ella por todo el trabajo que hace por mí. Todo lo que hace es para que yo salga adelante y pueda sacar el 100% de mi talento.

Dominó en el programa corto y luego también en el libre por delante de su compatriota Héctor Díez, ¿fue muy reñido?

Sí. Me lo puso difícil. Fue una competencia bastante dura, muy sufrida, pero todo esfuerzo tiene su recompensa. He trabajado mucho este año con mi entrenadora y hemos podido ganar.

¿Le salió todo casi perfecto?

Sí. Las actuaciones de este campeonato la verdad es que han sido bastante buenas. Estoy supercontento, ya que he podido demostrar lo que he trabajado este año.

¿Sabe que va a ser el foco de atención los próximos días?

Un poco sí pero es este momento de subidón, luego ya vuelve la normalidad, a seguir trabajando y buscar nuevos retos.

¿Se puede vivir del patinaje artístico?

Aún lo sigo viendo difícil. Ahora las marcas importantes de patines y ruedas intentan ayudar a más gente, pero vivir del patinaje es difícil. Yo ahora estoy estudiando un ciclo medio de Deportes en A Coruña y me gusta bastante.

A sus 17 años aún le queda otra temporada más como júnior, ¿cuáles son sus próximos retos?

El año que viene espero poder hacerlo mejor, quedar campeón de España, campeón de Europa y campeón del Mundo, ese es mi próximo objetivo.