Su nombre sonaba como principal candidato a la presidencia de la Real Academia Galega (RAG) y las apuestas se han cumplido. Xosé Luís Méndez Ferrín es, por el momento, el único candidato a ocupar el puesto que ha dejado vacante Xosé Ramón Barreiro Fernández. Precisamente éste ha sido el que ha propuesto al escritor de Con pólvora e magnolias junto a los académicos Xosé Luís Axeitos y Santiago Ramón Lorenzo Vázquez para sustituirlo. "Me había postulado para el puesto y me esperaba la propuesta, por eso la he aceptado", indica el escritor ourensano afincado en Vigo.

Aunque se da por hecho que ocupará la presidencia de la RAG, Méndez Ferrín prefiere ser cauto. "Hasta 48 horas antes de que se celebre el pleno se pueden presentar más candidaturas", confiesa. "A pesar de que todo el mundo lo ve tan claro, yo no lo veo así. Existen compañeros que me propusieron, pero quizá otros puedan presentar a un nuevo aspirante. También podría pensar en retirarme para evitar enfrentamientos", señala.

Entre los motivos que llevarían a Xosé Luís Méndez Ferrín a retirar su candidatura es la diversidad de puntos de vista que hay dentro de la RAG. "La Academia es una corporación viva en la que existen puntos de vista diversos y, aunque existe un gran consenso en la defensa del idioma, otros académicos podrían proponer a un candidato que crean mejor", indica.

La Academia ha fijado para el próximo 23 de enero el pleno en el que tendrá lugar la elección del nuevo presidente, cargo que ocupa provisionalmente Manuel González, secretario de la última junta directiva.

El narrador y poeta todavía no ha creado su junta directiva, pero espera recuperar a algunos de los miembros de las directivas de los últimos años. "Me gustaría que la directiva fuese lo más continuista posible", afirma.

Por otro lado, el intelectual gallego cree que el nuevo cargo en la RAG es más una responsabilidad que un desafío. "A lo largo de mi vida no he tenido grandes responsabilidades en organismo alguno, pero cuento con experiencia en el mundo de las letras para estar a la altura", indica Méndez Ferrín. "La RAG es una entidad con más de cien años donde han estado grandes personalidades y que cuenta con una gran cadena histórica. Además, es un organismo independiente y supone un reto importante", añade.

Línea correcta

Para el único candidato a la presidencia de la RAG la línea seguida por la entidad en estos últimos años ha sido la correcta. "Quiero continuar el camino marcado por Fernández del Riego y Barreiro, aunque hay más cosas que hacer y la Academia debe estudiar en silencio", señala Méndez Ferrín, quien asegura que todavía hay asignaturas pendientes. "En los próximos años debemos perfeccionar el diccionario y lanzar una gramática gallega de referencia", afirma.

Aunque la RAG ya se ha pronunciado sobre el decreto del gallego en la enseñanza, Méndez Ferrín opina que el borrador presentado por la Xunta es imposible de realizar y altamente lesivo para el gallego. "En este decreto hay cuestiones anticonstitucionales, como poner algunas asignaturas en una lengua no oficial, como es el inglés", apunta. "No quiero decir que no se enseñe en lenguas extranjeras, pero tenemos que pensar que las nuevas generaciones no deben ser bilingües o trilingües a costa del gallego", añade.

Según el escritor, para la sociedad gallega también es importante el estudio de lenguas como el portugués o el francés. "Es importante saber francés para poder subir puestos en Citröen, y portugués para pescar en Mozambique, por ejemplo", razona.