Fernando Martín y Manuel Jove volverán a enfrentarse en el juzgado

Fue Fernando Martín quien inició las hostilidades cuando el 11 de marzo, en la primera junta de accionistas celebrada tras el levantamiento del concurso de acreedores de Martinsa-Fadesa, propuso presentar una acción social de responsabilidad contra Manuel Jove y el exconsejero delegado de Fadesa, Antonio de la Morena, por "ciertas decisiones y actuaciones presuntamente dolosas o cuando menos negligentes".

Martín, que exige una compensación de 1.500 millones de euros, sostiene que cuando compró Fadesa la empresa valía menos de lo que se estimó en la tasación previa a la operación y acusó a sus administradores de una "incorrecta valoración de los activos inmobiliarios de Fadesa y de otras irregularidades relacionadas con la situación patrimonial y financiera de la compañía en diciembre de 2006".

Jove, que consideró la demanda como "un disparate" con el que Martín buscaba desviar la atención de sus propios problemas, contraatacó con otra denuncia en la que exige la retirada de todas las acciones legales. Su demanda considera que la acción de Martín "constituye una conducta contraria a la buena fe y un flagrante incumplimiento del acuerdo transaccional que firmaron en agosto de 2007".

Un acuerdo incumplido

Según la demanda, Fernando Martín firmó en su nombre y en el de Martinsa Fadesa dicho acuerdo, que incluía una cláusula en la que tanto Martinsa como el nuevo consejo de administración de Fadesa aseguraban haber "examinado detenidamente, con el debido asesoramiento legal y técnico la situación de la sociedad, sus activos y todos los aspectos relativos a la actividad empresarial desarrollada por la misma". "Finalizado este examen, Martinsa manifestaba su satisfacción con la situación de la sociedad y su conformidad con la gestión llevada por la anterior administración de Fadesa", según el texto.