El test de estrés de Oliver Wyman determinará que Novagalicia Banco necesita 6.200 millones de euros para recapitalizarse, por debajo de CatalunyaCaixa (7.200 millones) y a mucha distancia de lo que requerirá Bankia (26.400 millones de euros), pero por encima de Banco de Valencia (3.000 millones), según los cálculos de Bank of América Merrill Lynch.

A falta de que la consultora contratada por el Gobierno para radiografiar la banca española dé sus resultados definitivos -previstos para el próximo viernes- el banco estadounidense calcula que el sector financiero español necesitará un total de 52.000 millones de euros, de los que 43.600 millones irán para la banca nacionalizada. Además de las cuatro entidades más débiles, la consultora identifica necesidades de capital en Banco Popular (3.100 millones), Banco Mare Nostrum (2.100 millones), Ibercaja (1.200 millones), Liberbank (1.100 millones) y Unicaja (100 millones). Fuentes del Popular alegaron a Europa Press que el informe contiene varios errores metodológicos que invalidan la cifra de déficit de capital que éste atribuye a la entidad presidida por Ángel Ron. El más destacado es la inclusión por el analista en la cartera de crédito estresada de 20.000 millones de euros de crédito extranjero y a las Administraciones Públicas que Oliver Wyman no tiene en cuenta en su ejercicio para ninguno de los otros bancos. En el plan de negocio presentado y aprobado por el Banco de España, Popular "descarta ayudas públicas" y subraya su "capacidad de generación de ingresos ante las próximas pruebas de capital", sostiene el banco. La agencia Fitch rebajó ayer el rating de Banco Popular desde BBB- hasta BB+, al nivel de bono basura, por la "creciente inquietud" por su rentabilidad y posición de capital.

Merrill Lynch calcula que las nacionalizadas pasarán al banco malo activos por valor en 50.000 millones de euros.

La directora del FMI, Christine Lagarde, aseguró ayer que las necesidades de capital de la banca española estarán por debajo de lo previsto, y en línea con lo adelantado por el FMI, de en torno a 50.000 millones.