El actual puede ser el último puente de Todos los Santos en el calendario laboral de los españoles. El Gobierno mantiene conversaciones con la Conferencia Episcopal y con las autonomías para reducir los puentes festivos. Los cambios podrían entrar en vigor en 2013, si bien el impacto en ese año sería mínimo y el Ejecutivo no descarta postergarlos hasta 2014. La reforma implica cambiar a los lunes parte de los días de fiesta. Se baraja también convertir algún festivo en jornada laborable, como el 1 de noviembre o del 6 de diciembre, Día de la Constitución.

La vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, explicó ayer que el Gobierno confía en cerrar antes de final de año una negociación a la que también serán llamados próximamente los agentes sociales. Sindicatos y patronal habían alcanzado ya en enero de este año un primer acuerdo para reducir algunos puentes. Fue a raíz de que el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, anunciara su propósito de reordenar el calendario para hacerlo más eficaz y productivo.

Los primeros datos que han trascendido sobre los cambios que se barajan se explican en los siguientes puntos, aunque la reforma no está cerrada.

. Sin cambios. No se moverían las fiestas del 1 de enero (Año Nuevo), 12 de octubre (Día de la Hispanidad), 8 de diciembre (Inmaculada Concepción), 25 de diciembre (Navidad), Viernes Santo y Primero de Mayo.

. Al lunes. El resto de los festivos podrían ser cambiados al lunes en aquellos años en que coincidan en martes, miércoles o jueves.

. 15 de agosto. Uno de los puntos espinosos. Según algunas informaciones, este festivo (la Asunción) podría entrar entre los que no se moverán ante las presiones del sector turístico. En el acuerdo inicial entre CEOE y UGT y CCOO el 15 de agosto figuraba entre los puentes a evitar.

. Todos los Santos. El Gobierno está negociando también con la Conferencia Episcopal la posibilidad de que el 1 de noviembre pase a ser un día laborable.

. Puente de diciembre. Para el puente de los primeros días de diciembre, el más largo al encadenarse las fiestas del 6 (Día de la Constitución) y del 8 (Inmaculada Concepción), se manejan dos posibilidades: pasar la fiesta del día 6 al lunes o simplemente convertirla en día laborable. Se mantendrían las celebraciones oficiales conmemorativas del aniversario de la Carta Magna, pero en jornada de trabajo.

Presumiblemente, la reforma del calendario laboral estaría lista para 2013, pero Sáenz de Santamaría dio a entender que quizá no sea efectiva hasta 2014 porque el próximo año el calendario "viene ordenado por sí mismo". En 2013 son muy pocas las fiestas susceptibles de ser cambiadas. El Gobierno ha justificado la reforma por la necesidad de ganar productividad.