Las cuentas de la Seguridad Social registran cada vez con más frecuencia números rojos como consecuencia del descenso de afiliados a la Seguridad Social en los últimos años de dificultades y el aumento del número de pensionistas. Una situación más acentuada en el caso de comunidades como Galicia y Asturias, con un mayor porcentaje de población de edad avanzada. La comunidad gallega ya solo cuenta con 1,2 cotizantes por cada pensionista, una proporción que ha ido a la baja desde el inicio de la crisis: en 2008 había 1,5 afiliados a la Seguridad Social en Galicia por cada pensionista, en 2010 sólo 1,33, dos años después 1,3 y ahora 1,2, una ratio entre trabajadores y pensionistas que solo es más baja en Asturias, con 1,1, frente a la media nacional de 1,8, según los datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.

La comunidad gallega perdió 140.000 cotizantes en los últimos seis años -desde octubre de 2008-, al pasar de 1.071.700 a sólo 931.439, y sumó 30.467 pensionistas, lo que provoca un mayor gasto en pensiones mientras que los ingresos que obtienen las arcas públicas por los profesionales gallegos en activo tienden a la baja.

El análisis de la evolución de las pensiones por tipo prestación deja entrever que la llegada de las dificultades económicas hizo que muchos trabajadores optasen por jubilarse o prejubilarse ante el oscuro panorama que se cernía sobre ellos. Si la nómina global de pensiones en Galicia aumentó en más de 30.000 desde el inicio de la crisis -hay un total de 748.365 beneficiarios-, solo en el caso de las de jubilación el repunte fue de más de 26.000, lo que implica que este tipo de prestaciones acaparan el 86% del incremento y ya superan las 463.000. Mientras, las pensiones por incapacidad permanente pasaron de 67.955 en 2008 a 68.685 en la actualidad, las de viudedad de 180.441 a 186.954, las de orfandad de 19.938 a 23.538 y las en favor de familiares de 5.370 a 5.799.

Gasto de la Seguridad Social

Esta subida en la nómina global de las pensiones en Galicia provocó que el gasto de la Seguridad Social en la comunidad aumentase un 28% desde que comenzó la crisis. El gasto mensual rozaba en 2008 los 430 millones de euros y ahora supera los 550 millones.

Los datos revelan que la autonomía, por sí sola, no podría asumir el gasto que implican estas prestaciones y se beneficia del sistema solidario español, en el que las regiones más ricas equilibran los balances de los territorios con déficit de cotizantes. Frente a la baja proporción de afiliados por cada pensionista que registran Galicia y Asturias, otras comunidades españolas incluso superan los dos cotizantes por cada beneficiario de prestaciones contributivas. Es el caso de Madrid y Baleares (ambas con 2,5 trabajadores por cada pensionista) y Canarias (2,3). Por encima de la medida estatal de 1,8 está también Navarra (1,9) y justo en el promedio nacional están Andalucía, Cataluña y La Rioja.

En cuanto a la cuantía media de la pensión gallega, a 1 de octubre se situó en 737,04 euros mensuales, un 1,9% más que hace un año, pero sigue como la segunda más baja del Estado, sólo por encima de la de Extremadura, de 734,39 euros.

La prestación media en el conjunto de España ascendió este mes a 874,35, lo que, con un total de 9.239.688 beneficiarios, supone a la Seguridad Social un desembolso de 8.078 millones de euros, un nuevo récord de gasto para las arcas públicas. Esta cifra implica un repunte del 32% respecto a octubre de 2008, cuando el gasto en pensiones no llegaba ni a 6.100 millones de euros.