Un expresidente y dos altos cargos de la patronal nacional de la pequeña y mediana empresa, Cepyme, han sido llamados a declarar como imputados en la investigación que dirige un juez de Madrid sobre los pagos realizados por esta organización a su actual presidente y número dos de la patronal española CEOE, Jesús Terciado, que ya está imputado desde julio. El magistrado ve indicios de delitos de estafa y falsedad documental o apropiación indebida.

El juez Tomás Martín Gil dictó ayer un auto para citar a Jesús Bárcenas, expresidente de Cepyme; a José Alberto González Ruiz, actual secretario general, y al gerente José Manuel Vilar Martínez. Los tres declararán el próximo 12 de noviembre en relación a los presuntos cobros ilegales que, a partir de una denuncia de la patronal de Salamanca, se atribuyen a Jesús Terciado.

Según informó el diario El País, el fiscal se opuso al archivo de una investigación que intenta determinar si hubo irregularidades en los pagos que Cepyme realizó a Terciado entre 2010 y 2012. A pesar de que estatutariamente el presidente de las pequeñas y medianas empresas españolas no tenía sueldo en esos años, Jesús Terciado facturó cantidades relevantes a Cepyme a través de dos de sus empresas (Tecrucyl e Ingasert). Tecrucyl recibió de Cepyme 103.000 euros en 2010, 129.000 en 2011 y 82.167 en 2012.

A partir de ese último año, Jesús Terciado firmó un contrato de alta dirección y empezó a cobrar un sueldo de Cepyme por la vía ordinaria. En su declaración del pasado julio, el dirigente empresarial alegó que era habitual que los presidentes de Cepyme utilizasen facturas de sus empresas para cobrar de la patronal compensaciones por la dedicación al cargo. De ahí que el juez haya citado ahora a su antecesor en la patronal de las pymes, Bárcenas, y al secretario y al gerente actuales. El fiscal pidió también acceso a la contabilidad de Cepyme. Jesús Terciado fue denunciado también por facturar a través de sus empresas la suma de 180.000 euros a dos compañías a las que la patronal de Castilla y León adjudicó grandes contratos cuando el propio Terciado la presidía.

El diario El País reveló también que, aunque oficialmente no tenía sueldo, el actual presidente de Cepyme cobró en mayo de 2010 dietas que sumaban 3.240 euros brutos por 18 reuniones. Además, entre enero de 2009 y abril de 2012, Terciado gastó 29.920 euros con su visa de la patronal, 2.788 euros gastados en su propia gasolinera, y 4.616 euros en fines de semana. Una auditoría posterior de KPMG reveló gastos suntuosos como 4.557 euros en taxis en marzo de 2012 o los 5.876 en unas cortinas para su despacho. Estos gastos, sin embargo, no están siendo investigados pues una juez de Valladolid determinó que el problema debía resolverlo la propia patronal y no los tribunales.