El principal indicador de la Bolsa española, el Ibex-35, se disparó ayer un 3,83%, el segundo mayor avance del año, lo que le permitió acercarse a los 10.000 puntos, animado por el frenazo del empleo de Estados Unidos, que previsiblemente retrasará la decisión de la Reserva Federal (Fed) estadounidense de subir los tipos de interés.

Con la prima de riesgo en 124 puntos básicos, el Ibex-35 ganó 367,70 puntos, un 3,83%, hasta los 9.971,30 puntos, con lo que las pérdidas anuales se reducen a la mitad, concretamente, al 3%.

La Bolsa española lideró las ganancias de Europa, donde los principales mercados registraron importantes avances: París ganó un 3,54%, Fráncfort 2,74%, Milán un 2,73% y Londres un 2,57%.

La Bolsa reaccionó de forma positiva a los malos datos de empleo de EEUU, que reflejaron un frenazo de la economía norteamericana, lo que podría retrasar la subida de tipos de interés, según los expertos. Ese dato alentó la expectativa de que la decisión del banco central estadounidense no se produzca antes de fines de año.