El Ministerio de Industria estudia ampliar al conjunto de 2016 la bajada de la luz aplicada en agosto, así como rebajar entre un 0,5% y un 1% adicional el recibo y dedicar todo el superávit de tarifa de 2014 a reducir la deuda del sistema eléctrico. Fuentes del sector aseguraron que esa es la premisa con la que se confeccionan los documentos de trabajo para la elaboración de la orden ministerial de peajes de enero. Conforme a ese plan, el departamento que dirige José Manuel Soria será capaz de mantener la bajada de agosto sin necesidad de echar mano del superávit de tarifa de 2014, que finalmente rondará los 550 millones de euros y que se dedicará, como establece la ley, a reducir la deuda del sistema eléctrico.

El Gobierno aprobó en agosto una bajada de los peajes de electricidad del 4% que permitió abaratar un 2,2% el recibo de la luz. Para ello, se sirvió de un remanente de 250 millones de euros relacionado con los pagos por capacidad y, más en concreto, con la partida inicialmente prevista para incentivar la quema de carbón nacional y que no se gastó. Pese a la medida, Industria se encontró con que en 2015 puede tener un superávit de tarifa de 900 millones, así que se animó a buscar fórmulas que permitan rebajar la tarifa y que dejen este excedente en unos 600 millones. No solo ampliará al conjunto de 2016 la bajada de agosto, sino que maneja otras opciones para bajar hasta un 1% adicional la luz.

En 2016 está prevista la puesta en marcha del nuevo mecanismo de incentivo a la quema de carbón nacional mediante el apoyo a la modernización medioambiental de las térmicas, si bien este coste no tiene por qué cargarse sobre la tarifa y podría recaer sobre otros instrumentos, entre ellos un fondo mixto constituido entre el Ministerio de Industria y el de Medio Ambiente.

Superávit de tarifa

En cuanto al superávit de tarifa de 550 millones de 2014, las fuentes aseguran que se dedicará íntegramente a rebajar la deuda eléctrica y a cumplir de esta forma la regla de oro de la Ley del Sector Eléctrico de finales de 2013, en la que se obliga a destinar a esta partida los eventuales excedentes tarifarios.

Mientras, en el presente ejercicio el superávit aumentará a unos 600 millones si se consolida la previsión de aumento de la demanda de electricidad, mientras que en 2016 podría llegar a 900 millones, lo que generará un escenario mucho más cómodo para los responsables políticos del momento.