Bioetanol Galicia, la fábrica de biocombustible que el grupo andaluz Abengoa -en preconcurso de acreedores- tiene en Teixeiro (Curtis) cerró 2014 con pérdidas por primera vez en los últimos cinco años. Los números rojos ascienden a 687.000 euros, según la cuenta de resultados depositada por la firma en junio pasado en el Registro Mercantil de A Coruña. El repaso del balance y de las cuentas de la mayor fábrica de biocombustibles que existe en Galicia deja claro que la planta sufrió el impacto de la crisis, ya que sus ventas sufrieron un serio correctivo en los últimos cuatro años, al pasar de los 302,6 millones de cifra de negocios registrados en 2010 a los 138,6 del pasado ejercicio. Solo entre 2013 y 2014 la facturación se redujo un 15,6%.

El descenso fue muy superior entre 2010 y 2011 (45%), cuando la factoría ajustó su beneficio un 85%, y pasó de los 19 millones de hace cinco años a los 2,9 de 2011. Los resultados entonces eran positivos, pero, al igual que las ventas, fueron a menos en los últimos ejercicios. 2012 cerró con unas ventas de 160 millones, un 2,5% por debajo del año anterior, pero el beneficio creció (un 31%) hasta los 3,2 millones. 2013 fue el único ejercicio con crecimiento de ventas (+2,1%), hasta los 164 millones, pero el resultado volvió a reducirse. Nada más y nada menos que un 45%, hasta los 2,1 millones. Aquel fue el último año en positivo para Bioetanol Galicia.

La crisis de Abengoa estalló el 25 de noviembre, cuando la firma solicitó el preconcurso de acreedores, una suerte de periodo de gracia de hasta cuatro meses en el que una empresa que no puede hacer frente a sus pagos intenta lograr un acuerdo de refinanciación con la banca antes de suspender pagos. Al día siguiente, tanto los empleados como el alcalde de Curtis, Javier Caínzos, mostraron su preocupación por la factoría, que da empleo a casi 90 empleados y que genera una importante actividad en el transporte por carretera y portuario, aunque dejaban fuera de toda duda su viabilidad. El pasado día 18 sin embargo y como ya publicó este diario, Abengoa desveló que pretende deshacerse de sus filiales de renovables y bioenergía -que requieren más inversión- y centrarse en las secciones de ingeniería y construcción, lo que implica que la planta coruñesa está en la cartera de activos en venta.

La firma no sólo ha reducido sus ventas y beneficio, sino también sus activos, que según los balances depositados en el Registro Mercantil, disminuyeron un 21,3%, al pasar de 62,3 millones a los 49 con los que cerró el ejercicio pasado, básicamente por la depreciación de su inmovilizado material (terrenos y construcciones), que sumaban 45 millones hace un año.

Bioetanol Galicia tenía al cierre del pasado ejercicio 5,2 millones en deuda pendiente de cobro y 5,4 millones en créditos concedidos a empresas del grupo y asociadas. Sus fondos propios -que en 2010 ascendían a 43,6 millones- sumaban cuatro años después 6,2 millones, pero la planta también eliminó su deuda a largo plazo en ese periodo, que pasó de 1,4 millones en 2010 a cero cuatro años después. A corto plazo sólo cuenta con 408.000 euros de pasivo. Debe, eso sí, 115.000 euros a empresas del grupo y relacionadas, lo que le genera unos gastos financieros de 678.000 euros, casi tanto como las pérdidas de 2014. Con proveedores y acreedores comerciales también mantiene un pasivo de 68 millones, algo más de la mitad del que tenía en 2010. Sus gastos financieros son de 2,6 millones.