La firma coruñesa de electrodomésticos San Luis está dando los últimos pasos en su proceso de liquidación. Desde que la compañía entró en esta fase final del concurso de acreedores, el pasado verano, el administrador concursal ya adjudicó buena parte de sus activos, pero aún quedan por colocar algunos, como la tienda coruñesa de la plaza de Pontevedra. Este establecimiento, ubicado en el centro de la ciudad, es uno de los que mejores resultados económicos obtenía dentro del grupo y de los que más atractivo tienen para otras compañías por su buena situación. Actualmente pujan por hacerse con ella dos empresas: una dedicada a la venta de electrónica y electrodomésticos y una operadora de telefonía.

La primera interesada, y la que más fuerte está apostando por hacerse con el establecimiento de la plaza de Pontevedra, según fuentes conocedoras del proceso de liquidación de San Luis, es la empresa lucense Electrodomésticos Domínguez, que opera en Galicia bajo la marca Star Center y está integrada en la central de compras Cenor. Esta misma empresa ya se hizo en diciembre con las otras tres tiendas que San Luis tenía abiertas: la del centro comercial Los Rosales (A Coruña), la de Ourense y la de Santiago.

La otra firma que aspira a hacerse con el local más emblemático de la enseña creada por la familia del empresario Lorenzo López en los años 70 es una de las grandes operadoras de telefonía implantadas en España, que pretende abrir un establecimiento en esa zona para competir con otras empresas del sector ubicadas en las proximidades, en el entorno de la plaza de Lugo.

Mantenimiento del empleo

Una de las condiciones impuestas desde el inicio del proceso de liquidación de San Luis es la de mantener buena parte de los empleos dependientes de las tiendas, que en este caso ascienden a cinco. El administrador confía en que el adjudicatario del establecimiento de la plaza de Pontevedra cumpla este requisito, al igual que ocurrió en las tres colocaciones anteriores. "Desde que San Luis entró en concurso, la mayoría de los trabajadores han sido recolocados, bien en las empresas que se quedaron con las tiendas bien en otros sectores de actividad", explican fuentes cercanas al proceso de liquidación.

La compañía entró en concurso en abril de 2015 después de que a finales de 2013 Lorenzo López decidiese retomar el negocio que había liderado con éxito durante décadas, hasta su venta en 2007 a la gala Darty. La competencia que supone la venta online, sin embargo, se hizo insalvable para la compañía, que llegó a tener casi una veintena de tiendas entre Galicia, Castilla y León y Madrid en esta segunda etapa.