El mes de enero, por el fin de la campaña de Navidad, tiene su particular cuesta en lo que al desempleo se refiere. Este año, aunque fue levemente inferior a la de otros ejercicios, supuso una importante pérdida de puestos de trabajo, más acentuada en el caso de Galicia que en el conjunto del Estado. El paro registrado en la comunidad gallega aumentó el mes pasado más del doble, un 3,3%, que la media nacional, del 1,4%. En números absolutos, supone que haya 7.639 personas más inscritas en las listas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) en Galicia que en diciembre, un total de 236.447, según los datos difundidos ayer por el Ministerio de Empleo.
La comunidad gallega es además la tercera autonomía con mayor incremento del paro tanto en números absolutos -solo tras Andalucía (+9.254) y Madrid (+7.978)- como en porcentaje sobre su nómina total de profesionales sin trabajo, superada por Cantabria (+3,8%) y Navarra (+4,6%).
La destrucción de empleo en enero en la comunidad gallega, sin embargo, fue muy superior a la que revelan los datos del antiguo Inem. La Seguridad Social perdió en Galicia más de 15.200 afiliados durante el mes pasado, un 1,61% del total, con lo que el censo gallego de cotizantes se reduce a 930.883 personas. Una vez más, la comunidad tiene el tercer mayor descenso proporcional en el número de ocupados, solo superada por Cantabria (-1,74%) y Comunidad Valenciana (-1,68%) y muy por encima del descenso medio nacional, del 1,2%.
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Esta gran diferencia entre el número de nuevos parados (7.639) y los empleos realmente destruidos en Galicia (15.240) se explica porque la mitad de los ocupados que perdieron su puesto de trabajo no se inscribieron en las listas del Inem al no tener derecho a cobrar prestación o subsidio y tener pocas esperanzas de lograr un nuevo empleo por la mediación del SEPE.
En el conjunto de España el número de parados subió en enero en 57.247 personas, el incremento más bajo en el primer mes del ejercicio desde 2004, con lo que la cifra total de desempleados se sitúa en 4.150.755 personas. Al igual que en el caso de Galicia, los puestos de trabajo destruidos fueron muchos más, un total de 204.043, según los datos de afiliación publicados por el departamento que dirige en funciones Fátima Báñez, con lo que la Seguridad Social cuenta actualmente con 17.104357 cotizantes.
La historia de Galicia se repite nuevamente en el Estado. La mayoría (el 72%) de los profesionales que perdieron su trabajo el mes pasado en España no se anotó en las listas del SEPE al no haber cotizado lo suficiente para cobrar una prestación, al tener pocas expectativas de lograr una ocupación por esta vía o al optar por la emigración.
Por provincias, la gallega que más parados sumó en el primer mes de 2016 fue Pontevedra, con 3.710 más, seguida de A Coruña, con 2.161, Ourense (+924) y Lugo (+844). Las posiciones son prácticamente idénticas en cuanto a destrucción de empleo: Pontevedra fue la que más afiliados perdió (6.367), seguida de A Coruña (5.970) y Lugo y Ourense intercambian sus puestos, la primera con 1.515 ocupados menos y la segunda, con 1.388.
En el análisis del paro por sectores, el fin de la campaña navideña deja a los servicios como el gran perjudicado, con buena parte del repunte registrado en Galicia. Las actividades relacionadas con este sector elevaron su nómina de desempleados en 7.336 personas, muy por encima del repunte de 544 registrado en la construcción o los 84 del grupo de profesionales sin empleo anterior. Mientras, la industria redujo su lista de parados en enero en 317 personas, y la agricultura y la pesca, en ocho.
La importancia de las fiestas navideñas para el mercado laboral español en diciembre, y sus nefastos efectos en enero, queda patente también en la evolución del paro por sectores en el conjunto del Estado. Al igual que en Galicia, los servicios concentraron buena parte del incremento en el número de inscritos en las oficinas del SEPE, con 67.129 más que a cierre de 2015. La agricultura, por su parte, sumó 3.905 desempleados, mientras que el grupo de profesionales sin empleo anterior (-8.941), la construcción (-4.281) y la industria (-475) lograron reducir su nómina de personas sin trabajo.
Los datos de paro registrado provocaron ayer reacciones muy distintas de las administraciones y de los sindicatos y oposición.
En Galicia, la Xunta recurrió a los datos interanuales (el paro bajó en 22.555 personas respecto a enero de 2015) para decir que el descenso del desempleo en términos absolutos es el mayor de la serie histórica. Además, remarcó que la cifra de personas sin ocupación está en niveles de hace un lustro.
Mientras, los sindicatos lamentaron las políticas de empleo de la Xunta, "con la insistencia en el mismo modelo productivo que nos condujo a la crisis". Las centrales sindicales gallegas también lamentaron que cada vez son más los parados que carecen de cualquier tipo de prestación por desempleo, actualmente más de la mitad.
El Gobierno central, por su parte, culpó del aumento del paro a la situación política actual al sostener que no hay nada que perjudique más a la economía y a la creación de empleo que las dudas y la inestabilidad. Un argumento al que se sumó también la patronal española CEOE, que urgió a formar gobierno "porque la incertidumbre condiciona el avance económico y la creación de empleo".
Los sindicatos insistieron en que el poco empleo que se crea en España es temporal y precario y mientras el PSOE sostuvo que el modelo de empleo del PP "no sirve", Ciudadanos defendió que derogar la reforma laboral de 2012 "no es la solución al paro".
