La sentencia judicial emitida el pasado 3 de mayo por la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de A Coruña supone la resolución del segundo de los cuatro recursos planteados contra sentencias emitidas por los juzgados coruñeses sobre la entrada de empresarios gallegos en el accionariado de Novagalicia Banco. En este caso -el de un grupo de inversores liderados por Corporación Hijos de Rivera- se trata de una de las dos demandas que recibieron una sentencia desfavorable. La otra es la del empresario Manuel Añón, que invirtió 25 millones en la entidad financiera y que recibió el "no" del juzgado con el argumento de que no hubo ocultación de información a los inversores, al encontrarse miembros de la cúpula -el presidente, José María Castellano, y el consejero delegado, César González-Bueno- entre ellos. Este recurso está pendiente de resolución.

Las otras dos apelaciones, presentadas por NCG y el FROB, son contra sendas sentencias favorables a los inversores gallegos y una de ellas ya fue resuelta en julio del año pasado: la del grupo de distribución alimentaria Gadisa -al que en Primera Instancia se le reconoció el derecho a recuperar los 10 millones invertidos en el banco pero que la Audiencia Provincial de A Coruña rectificó, negando la obligación de devolver la inversión-. El otro proceso favorable a los empresarios y pendiente de la resolución de apelación es el del grupo de inversores liderado por el empresario coruñés Manuel Jove, que recuperarán los 8,5 millones invertidos si el fallo inicial se convierte en firme.