España es el segundo país de la UE-28 con más paro de larga duración, con una tasa del 11,4%, lejos del 1,7% que tenía antes de la crisis, según un informe del Instituto de Estudios Económicos (IEE) con datos a 2015 de Eurostat. Sólo Grecia presenta una tasa de paro de larga duración (más de un año en el desempleo) superior a la española, con un 18,2%. España está casi siete puntos por encima de la media comunitaria, que se situó en 2015 en el 4,5%.

Además de España y Grecia, otros nueve países sobrepasan el promedio europeo: Croacia, con una tasa de paro de larga duración del 10,3%, Eslovaquia (7,6%), Portugal (7,2%), Italia (6,9%), Chipre (6,8%), Bulgaria (5,6%), Irlanda (5,3%), Eslovenia (4,7%) y Letonia (4,5%).

Sólo unas décimas por debajo de la media comunitaria aparecen Bélgica (4,4%) y Francia (4,3%), mientras que Lituania, Hungría, Países Bajos, Polonia y Rumanía sitúan su tasa de paro de larga duración cerca del 3%.