El Banco Central Europeo reiteró ayer su compromiso de cumplir su obligación y ampliar su programa de compra de activos "más allá de marzo de 2017 si es necesario", indicó su presidente, Mario Draghi, durante su participación en la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI). "El BCE tiene su intención de llevar a cabo compras de activos hasta el final de marzo de 2017 o más allá, si es necesario, y en cualquier caso hasta que el consejo de gobierno observe un ajuste sostenido del ritmo de la inflación hacia niveles por debajo, pero cercanos, al medio plazo", señaló Draghi en su discurso preparado ante el Comité Monetario y Financiero del FMI.

El BCE tiene actualmente en marcha un programa de compra de deuda pública y privada por valor de 80.000 millones en la zona euro hasta finales de marzo de 2017, y mantiene los tipos de interés rectores, los que cobra a los bancos por prestarles a una semana, en el mínimo histórico del 0 %.

Mientras, El G20 alertó ayer de que los crecientes riesgos globales han aumentado asociados a la incertidumbre política por las elecciones en economías avanzadas, como EEUU, y las dudas sobre el resultado del Brexit. "La incertidumbre y los riesgos que encara la economía global han aumentado, dado que algunas de las principales economías han entrado en elecciones, los efectos colaterales del Brexit son inciertos y las vulnerabilidades del sistema financiero se han ampliado", aseguró en Washington Lou Jiwei, ministro de Economía de China, país que ocupa la presidencia rotatoria del G-20.